sábado, 23 de mayo de 2015

Un día nos animamos a ser libres





Juntamos todos los miedos y desconfianzas. Las pusimos sobre la mesa. Y con lágrimas de amor les dijimos adiós.
Nos curamos y nos abrazamos, lloramos, reímos y fuimos.
No nos importaron las condiciones que nos ponían de afuera. Nos escuchamos y fuimos libres.

Ese día empezamos a amarnos  incondicionalmente, no porque alguno resigne algo para el otro, sino porque todo está a la vista. Porque nos amamos y el amor es libre también. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario