sábado, 17 de diciembre de 2011

Puentes

Era 2008. Yo estaba en el secundario, casi en los últimos años. Salía con un chico que ya terminaba de cursar. ÉL me leyó un texto que le habían dado el literatura, resongaba porque le hacían escribir en base a ese texto. Tenía que hablar de puentes, verse cruzando un puente, verse como era y como sería al cruzar ese puente.

Acá estoy en el medio, me veo de un lado, me veo en el otro lado. Estoy atrapada en el medio del puente. No parece seguro estar parada acá, es muy finito y de cuerda, está muy alto y de lo angosto que es se percibe lo sola y desprotegida que me encuentro.
Tengo que tomar una decisión, tengo que poder caminar hacía uno de los lados, salir del medio, no sé cuanto más aguantará la soga mi peso. No puedo mirar a los costados, estoy tan alto que solo mirar a los extremos me da vértigo.
Las salidas son distintas, en una todo es nuevo y produce mucho miedo, hay confusión. Nada es certero. En la otra hay una historia. En una hay ganas de vivir, de ser alguien nuevo, de crecer. En la otra hay esfuerzo. En una hay fuerza. En la otra hay protección.

No puedo salir del medio. Necesito salir de acá.



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